Este año, los Premios Max han convertido la ciudad de Bilbao en un escenario y han ofrecido en el Teatro Arriaga de la capital vasca un espectáculo oscuro, urbano, industrial y minimalista dirigido por Calixto Bieito y Alex Gerediaga en el que han salido triunfadores El bar que se tragó a todos los españoles, con tres Premios Max (Mejor Espectáculo de Teatro, Mejor Autoría Teatral para Alfredo Sanzol y Mejor Diseño de Espacio Escénico para Alejandro Andújar), y dos espectáculos periféricos como son La Mort i la Donzella, también con tres Premios Max (Mejor Espectáculo de Danza, Mejor Coreografía para Asun Noales y Mejor Diseño de Iluminación para Juanjo Llorens) y surgida de L’Escorxador de Elche con el apoyo del Insitut Valencià de Cultura, y Con lo bien que estábamos (Ferretería Esteban), una producción musical aragonesa que ha acaparado dos Premios Max (Mejor Labor de Producción para Nuevedenueve Teatro y Mejor Composición Musical para Espectáculo Escénico para Mariano Marín).

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En la gala, además de hacer entrega de los premios y del Premio Max de Honor a la actriz y productora teatral Gemma Cuervo, el Premio Max Aficionado o de Carácter Social a la compañía de teatro amateur Teatro Estudio de San Sebastián y el Premio Max del Público a Tonet Ferrer (por La vida empieza hoy), hemos podido disfrutar de las actuaciones de un impresionante Asier Etxeandia, conduciendo la gala a medias con Yogurinha Borova, de la cantante de afrofunk Áfrika Bibang, de Paula Parra (LASALA) al ritmo electrónico de Paul Kalkbrenner, de la bailaora Adriana Bilbao acompañada de Pedro Soler y Beñat Achiary, de la soprano vasco-suiza Ausrine Stundyte, del bersolari Jon Maia o de la batuta de la espectacular BilbaoSinfonietta.

Aquí va una selección de fotografías con los mejores momentos de la gala, de la alfombra roja y de los dos photocalls, el de finalistas y el de ganadores.

© Todas las fotografías son de Domi Alonso y Enrique M. Esquibel